APISTOS

SOBRE el autor (O SU AUSENCIA)
¿Y si lo que importa no es quién escribe?
Apistos no tiene rostro. No tiene historia. No tiene pasado.
No hay registros de quién escribe ni de quién publica.
En una época que demanda protagonismos, Apistos es un fantasma.
En una época que exige rostros, nombres y explicaciones, hay quien ha decidido desaparecer detrás de las páginas.
Tal vez no sea el único, pero en un mundo en donde todos buscan ser vistos, volverse invisible es el mayor acto de rebeldía.